La entrega de los Premios Oscar fue vista por más de 40 millones de espectadores, solo en los EEUU, una cantidad de público suficiente para que alguna empresa saque provecho.
Y qué mejor oportunidad de hacerlo si en escena está Ellen DeGeneres, reconocida por su carisma y humor. En la era de la doble pantalla y la interacción, a los 40 millones de televidentes debe sumárseles la potencial audiencia en las redes sociales.
La presentadora de los Oscar tomó una "selfie" (autofoto) junto a Meryl Streep, Jennifer Lawrence, Bradley Cooper, Kevin Spacey, Julia Roberts, Brad Pitt, Angelina Jolie y Lupita Nyong'o.
En pocos minutos, la imagen fue compartida más de 2,3 millones de veces, cifra que la convirtió en la foto más retuiteada de la historia.
La imagen batió el récord establecido por la foto de la victoria de Barack Obama en las últimas elecciones. Esa instantánea de Obama abrazando a su mujer, Michelle, la noche de los comicios de 2012 había sido compartida más de 780.000 veces.
¿Qué se veía por TV? Un celular de gran tamaño con carcasa blanca.
DeGeneres continuó tomando autofotos con otros famosos. En ellas podía leerse claramente "Vía Twitter paraiPhone". Si bien todo parece indicar que todas las imégenes salieron de un celular de Apple, la realidad indica otra cosa.
El móvil responsable de la autofoto más compartida en la historia es un Galaxy Note 3 de la surcoreana Samsung, empresa que habría realizado de esta manera una jugada perfecta para intentar posicionar a uno de sus productos estrella en un mercado clave.
Samsung compró cinco minutos de publicidad durante la gala para promocionar su flamante Galaxy S5. Se estima que la surcoreana invirtió u$s24 millones en los Premios desde 2009.