En la asamblea de hoy logró designar a un economista de La Cámpora como vicepresidente de la empresa que administra al sector; otro golpe al poder de Julio De Vido.
El ministro de Economía, Axel Kicillof, quedó hoy con control pleno del mercado eléctrico. En la asamblea de accionistas de hoy de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) logró imponer a Esteban Kiper en la vicepresidencia de la compañía, tal como anticipó este medio en horas de la tarde.
Kiper es economista, militante de La Cámpora y se desempeñaba como vicepresidente de la Casa de la Moneda. El ministro también controla desde el 30 de mayo pasado pasado dos áreas estratégicas de la compañía: la gerencia general, a cargo de Juan Manuel Abud, y su dirección de finanzas.
Cammesa, integrada por el Estado Nacional y las cámaras del sector, es el despacho de la generación, transporte y distribución del mercado eléctrico argentino. Asimismo administra los fondos oficiales para la importación de fuel oil. A causa de su gran magnitud, es conocido en la jerga empresaria como "el guitaducto".
El avance de Kicillof en el mercado eléctrico terminó de vaciar de poder al ministro de Planificación, Julio De Vido, en este sector. El vicepresidente saliente es José Sanz, un hombre ligado al secretario de Energía, Daniel Cameron. Su salida no estaba prevista en la orden de temas de la reunión, pero la moción fue propuesta por el representante del Estado Nacional.
Los accionistas aprobaron a Sanz una licencia con goce de sueldo para que se retire como asesor de Cameron. La asamblea fue rápida, duró algo más de una hora y contó con la asistencia de Cristian Girard, alfil del ministro de Economía y coordinador de los directores estatales en empresas.
En la mañana de hoy el Ministerio de Economía negoció la remoción de Sanz con la Asociación de Transportistas de Energía Eléctrica (Ateera), la Asociación de Distribuidores (Adera) y la Asociación de Generadores (Ageera). Todos estas accionistas de la empresa.
El cambio de hoy estrangula el campo de accción de Luis Beuret, subsecretario de Energía y presidente de Cammesa. Con la nueva disposición de fichas en el tablero, Cameron y De Vido en la práctica ya casi no tienen ingerencia en el sector eléctrico.
EL ASCENSO
El control de Kicillof en la política energética comenzó a formalizarse en julio de 2012 cuando, además de obtener una silla permanente en el directorio de YPF, quedó con la titularidad Comisión de Planificación y Coordinación del Plan Nacional de Inversiones Hidrocarburíferas.
Dos meses antes, en la petrolera pública Enarsa ocurrió lo mismo. Juan José Carbajales, un abogado con posgrados en regulación energética, fue ascendido por la intermediación del ministro a subgerente general para vigilar de cerca la gestión.
Enarsa es poseedora de la otra gran caja energética, ya que se encarga de las compras al exterior de gas licuado. Los cuestionamientos del directorio a Exequiel Espinosa por el precio de estas importaciones comenzaron a hacerse más intensos. Como resultado, Espinosa -que había sido designado por De Vido en 2004- renunció.
En conjunto, las importaciones de combustible que realizan Enarsa y Cammesa superaron los U$S 13.000 millones durante en 2013..