Sanz Cerbino comentó en diálogo con las radios del Grupo Apolo las actividades desarrolladas y a desarrollar en el marco de una protesta por 36 horas. En el marco del desmantelamiento del sistema científico y tecnológico y del ajuste a las universidades, la reciente asamblea de trabajadores del CONICET resolvió continuar con su plan de lucha en unidad con los trabajadores estatales. Convocados por ATE CONICET, los trabajadores y trabajadoras de la ciencia resolvieron: adherir al paro de 36 horas, convocado para los días 29 y 30 de octubre por ATE Nacional, concentrando el día 29 en el Polo Científico a las 11 hs. para confluir en la marcha de estatales al Ministerio de Desregulación; la realización de una feria de ciencias en Plaza Houssay de Capital Federal el 15 de noviembre; y la realización de una vigilia en el Polo Científico el 10 de diciembre a un año de la asunción de Milei. 

La situación del CONICET está marcada por los despidos de comienzos de año y los derivados de la cancelación intempestiva de becas el pasado julio, la caída del 26 % del salario real de sus trabajadores, los contratos a tres meses del personal administrativo y de gestión, la falta del ingreso durante todo 2024 de casi mil trabajadores con cargos concursados, el desmantelamiento de la Agencia I+D+I (principal organismo de financiación de la ciencia) y el congelamiento de subsidios para investigación, resultante de la retención por parte del gobierno de 53 millones de dólares en subsidios ya otorgados por organismos internacionales.

Gonzalo Sanz Cerbino, dirigente de ATE Conicet expresó que cientos de investigaciones están paralizadas y la fuga de cerebros está en pleno desarrollo, planteando un escenario inédito en el país. 

Sanz Cerbino recordó que Conicet fue una de las primeras áreas del Estado que sufrió el ajuste