Sierras del Sur atraviesan la temporada sin fuegos y ofrecen experiencia de restauración natural tras sufrir en 2020.
Micaela Bedano, residente en una reserva natural de más de 100 hectáreas en la zona de Alto Lindo, próxima a Las Albahacas, dijo en el programa Es Un Montón por Radio Río Cuarto que después del paso del fuego no se intervino sobre el territorio y volvió naturalmente el crecimiento de especies nativas. Inclusive algunas semillas propias de la región han sobrevivido al paso de las llamas.
La otra experiencia acumulada después de aquellos siniestros devastadores es que la presencia controlada de animales permite mantener el monte libre de material combustible por el pisoteo y el pastoreo. Las pérdidas irreparables son los árboles que tenían centurias de antigüedad.
En aquellos momentos, las crónicas señalaban que los incendios en la provincia de Córdoba llevaban diez días sin dar tregua a los bomberos, que se trasladan de un lugar al otro para intentar controlar el avance de las llamas y salvar las casas.
Al momento, había focos activos en el Valle de Punilla, Alta Gracia y Alpa Corral.
En esta última localidad, ubicada a 70 kilómetros de la ciudad de Río Cuarto, los operativos se extendieron hasta las 3 de la madrugada. Horas antes, el fuego rodeó las casas y los vecinos tuvieron que ser evacuados.
En esa zona, trabajaron 150 bomberos. Los incendios arrasaron 27 mil hectáreas en Alpa Corral y localidades vecinas como Villa Chacay y Las Albahacas. Luego, cruzaron la frontera provincial hacia la zona de Papagayos, en Chacabuco, San Luis.