Los autores del proyecto -Alejandra Ferrero, Inés Contrera y Matías Gvozdenovich- señalaron en los fundamentos que se trata de una reparación histórica, y añadieron que “la guerra no se podría haber sostenido y desarrollado sin no hubiese existido apoyo logístico desde el continente”.

Si bien el texto inicial habla de veteranos, Ferrero propuso “sustituirla por la palabra ‘soldados’ para no entrar en conflicto con los veteranos de guerra”. Aclaró también que se trata de un “reconocimiento moral, que no trae consigo ningún tipo de reparación económica”.

El borrador incluye también a las personas que revestían servicio como personal de cuadro en el estado militar permanente, que hayan estado en forma certera prestando servicios y que, con posterioridad e inmediatez a la finalización del conflicto, hayan optado por la baja a su solicitud.

Belindo Arguello vicepresidente nacional de la agrupación, señalo que se busca también el reconocimiento de poder contar con los beneficios sociales, no la pensión, para lo mas de 3400 veteranos continentales cordobeses.