En esta canción, furiosa, energética y de cadencia pesada, convive un híbrido entre el rock, la electrónica y algunos toques industrial y drum and bass.

Fiel al concepto del disco y su observación sobre la sobrecarga tecnológica e individualismo que está permeando sobre nuestro día a día, en su letra advierte el aumento de la violencia en el mundo y la importancia del autocuidado, de poder desconectar de las distracciones que ofrece la modernidad y de valorar los pequeños momentos que enriquecen nuestra vida como forma de resistencia.

El video muestra a Benito dudando de la realidad cotidiana en la que está inmerso en una puja con Blair, que caracterizada como una hechicera moderna, busca que el cantante despierte de su letargo.

Según Benito "La Paz de los Cementerios es un tema que nació de la necesidad de querer hacer algo con un poco más de carga pesada. El disco del que es parte tiene un peso importante en cuanto a la lírica y la música y este tema engloba muy bien lo que quise transmitir con el álbum: poder observar el mundo y ver qué cosas que funcionan bien, qué cosas que funcionan mal; darnos cuenta que muchas promesas que había del futuro hoy son las cosas que al final nos terminaron jugando en contra. Algo de esto es lo que quise comunicar con la letra y con el vídeo también, dónde se ve un cementerio de objetos tecnológicos de un momento donde la tecnología parecía revolucionaria. Musicalmente me inspiré bastante en proyectos que me encanta escuchar como Nine Inch Nails, la música industrial, los riffs del glam rock de los 70's."




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