Ernesto Guevara, responsable del Mercado de Abasto de Río Cuarto dialogó con AM1010 acerca de la realidad frutihortícola de la zona.
“El Mercado de Abasto es una de las instituciones, dentro del ámbito municipal que, aparte de ser el punto de comercialización de frutas y hortalizas, tiene la función de verificar el origen de todo lo que ingresa a la ciudad” expresó Guevara.
El Presidente del Mercado de Abasto planteó que la mayor parte de los productos frutihortícolas que se comercializan en Río Cuarto ingresan a través del Mercado de Abasto de Río Cuarto y desde ahí van hacia los comercios minoristas. “Pero algunos comercios minoristas, las llamadas grandes superficies de venta, los hiper, que tienen su propio centro de distribución, ingresan los productos desde sus propios centros, y con el área bromatológica de la municipalidad se verifica si proviene de un lugar habilitado, puede ser otro mercado, un centro de abastecimiento, una planta de empaque, para garantizar que el origen está dentro de los que el SENASA admite como proveedores de frutas y hortalizas”.
En el Cinturón Verde de Río Cuarto hay una variada oferta de productos frutihortícolas que varían según la estación del año.
“En verano hay una excelente calidad en productos de los que llamamos hortalizas de fruto, como son el caso de tomate, pimiento, berenjena, muchos de esos productos se trabajan bajo cubierta en invernaderos, algunos a campo, y a partir de ella, a la salida del verano y el ingreso del otoño e invierno, la prioridad pasa por las hortalizas más de hoja, todos los tipos de lechuga que conocemos, la rúcula, la achicoria, acelga, espinaca”.
También, en función de la época del año, se realizan otros tipos de hortalizas, como brócoli, coliflor, repollos, algunas raíces como zanahorias, remolachas.
Si bien el cinturón verde es bastante amplio en su producción, no hay muchas frutas, salvo algunos productores que tienen durazneros, pero hay un déficit en este punto.
Y por una cuestión de producción de escala, tampoco se cuenta con hortalizas pesadas como papa, batata, y cebolla.
La producción que se concentra en el Mercado de Abasto, es a escala comercial, “después hay algunas producciones alternativas, que son de autoconsumo, algunas que tienen una producción que comercializan sus excedentes a través de algunas vías alternativas, que conocemos como productos de la agroecología, donde hay algunas ferias establecidas en días determinados para su comercialización, pero si no, los que producen en escala comercial y los que son los principales proveedores de las verdulerías, son las aproximadamente 40 quintas que proveen las playas de comercialización, dentro del Mercado de Abasto”.
Guevara comentó a Micrófono Abierto que este año ha sido bastante particular, ya no sólo por la estacionalidad, “hay condiciones ambientales que han sido adversas este año, muchísima humedad a la salida del verano y a principios del otoño, que ha generado muchas pérdidas en el cinturón. Este año hemos tenido muy poca producción de zapallo local para los locros. Después tuvimos muchos fríos anticipados, con muy bajas temperaturas, bastante anticipadas a la salida del otoño, que han generado pérdidas inesperadas en nuestro cinturón y que esos fríos se han extendido a zonas más al norte del país”.
Tanto el tomate y el pimiento se ha ido por las nubes porque los fríos volvieron a ser muy intensos.
“Obviamente hay heladas en invierno, pero quizás no en los niveles que ha habido este año con tanta intensidad, tan prolongadas, tan continuas, y esto ha generado muchos inconvenientes. Ha habido menos provisión de algunas hortalizas, esto en general hubiese ocasionado un aumento importante en el precio porque justamente cuando hay menos oferta aumenta bastante el precio”.
Guevara reconoció que hay una baja en la demanda de frutas y verduras.
Sin embargo si bien “es probable que algunos precios estén un poco más por arriba de lo habitual, no aumentarán mucho porque justamente al haber poca demanda esos precios se van a sostener”.


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