Mycorium es una startup argentina que transforma residuos de la industria del vino en biocuero. El proceso consiste en juntar los desechos con hongos filamentosos el cual después de 10 días se come todo el residuo y conforma una capa que se cosecha tras un tratamiento realizado posteriormente.

Así es como se obtiene el material, según detalló uno de los integrantes de la empresa, Agustin Schiavio, Licenciado en Economía, por La Tarde del Limón.

Si bien la empresa surgió en 2022, el equipo de investigación en desarrollo de biotecnología se conformó hace 15 años.
 
El proceso despertó gran interés de marcas internacionales. Además, si bien la legislación Argentina no tiene tantas exigencias en materia de sustentabilidad, las firmas nacionales también mostraron interés en cumplir con ellas. Es el caso de Topper y Bianchi Cueros con quienes estos jóvenes buscan generar una sociedad comercial.

En tanto, señaló que hoy están dedicándose a aumentar la resistencia del producto y luego trabajarán sobre la variedad de las texturas y colores. “La dificultad técnica de desarrollo para autos es mayor”, aclaró.

Dijo que la empresa entiende que el cuero tiene que ser sustentable en todos sus pasos y ofrecer una alternativa a los realizados en base a plásticos.

Por último, estimó que lograr escala comercial les llevará cerca de tres años para validar el material e incrementar el volumen de producción.