Este martes quedó oficializada la creación del Programa Nacional MenstruAR, que promueve el acceso igualitario a la gestión menstrual sostenible.
Los municipios de todo el país comenzarán a entregar copas menstruales.
Este martes, el Programa Nacional MenstruAR fue oficializado en el Boletín Nacional, informó el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad. Además, el programa promueve el cuidado del ambiental a través de la utilización de productos sustentables como toallitas reutilizables, copas menstruales, entre otras.
El programa promueve el acceso igualitario a la gestión menstrual sostenible. Fue presentado a fines de mayo por la ministra Ayelén Mazzina y, según se explicó, es “una política integral que acompaña y asesora a gobiernos locales para el fortalecimiento de los programas que llevan adelante sobre gestión menstrual”.
Mediante la Resolución 393/2023, firmada por la ministra Mazzina, se indica que el programa funcionará en el marco de la Dirección Nacional de Articulación de Políticas Integrales de Igualdad, dependiente de la Subsecretaría de Políticas de Igualdad.
También se crea la mesa intersectorial federal de articulación del Programa de acceso igualitario a la gestión menstrual sostenible, que estará integrada por las áreas de género y diversidad de los tres niveles de gobierno, organizaciones sociales, políticas, sindicales, productivas, empresariales, no gubernamentales, tanto del sector público como del privado.
Datos del informe “Diagnóstico sobre uso y percepción de insumos de gestión menstrual”
-En Argentina, más de 12 millones de personas menstrúan.
-El 60 % de las personas encuestadas utiliza toallitas descartables. Estos productos, junto con los tampones (15 %), son los más elegidos.
-Entre el 40 % y el 50 % desconocen los efectos secundarios que tiene sobre la salud el uso de toallitas y tampones y su impacto ambiental.
-Más del 95 % de las personas considera que el Estado debería eliminar el IVA de los productos de gestión menstrual, así como también distribuirlos de forma gratuita en escuelas, cárceles y centros comunitarios.
-El 43 % se vio en la necesidad de modificar sus hábitos en el uso de estos productos por motivos económicos.