Violencia, seguridad, exclusión digital, legalización de inmigrantes, la promoción de herramientas de diálogo para la pacificación social y el cumplimiento de los objetivos de la agenda 2030 para la ciudad, ocuparon el interés del encuentro. La vicerrectora Nora Bianconi y la coordinadora del organismo de derechos humanos universitario, Rosa Cattana, recibieron al ombudsman de Río Cuarto, Ismael Rins; al coordinador del Observatorio Permanente de Personas Migrantes, Walter Torres, y a Verónica Pipino, del Centro de Acción Comunitaria.
A una semana de haberse reunido con la rectora Marisa Rovera, el Defensor del Pueblo de Río Cuarto, Ismael Rins, junto con otros integrantes del organismo, delinearon con la vicerrectora Nora Bianconi y la coordinadora del Observatorio de Derechos Humanos de la UNRC, Rosa Cattana, las líneas de acción que buscarán ejecutar en los próximos meses.
Durante la reunión, que también contó con la presencia de Walter Torres, a cargo del Observatorio Permanente de Personas Migrantes, del que forman parte la Universidad y el Concejo Deliberante, y de Verónica Pipino, del Centro de Acción Comunitaria, se evaluaron además las actividades en marcha en el marco de distintos convenios de cooperación entre ambas instituciones.
Cattana se comprometió a retomar todas las acciones que se encuentran pendientes entre la Defensoría y el Observatorio de DDHH, para lo cual adelantó que se desarrollará un plan de diagnóstico y de organización de aquí a fin de año.
El encuentro se celebró en horas de la mañana de este martes en la Sala Pereira Pinto del Rectorado. La Vicerrectora subrayó que “la participación activa de la Universidad en estos espacios es “una prioridad”. Y agregó: “También lo es generar vínculos con todas las instituciones, particularmente para la defensa de los derechos humanos. Sabemos lo valioso del tema y la incidencia que tiene intervenir en los sectores más vulnerables de la sociedad”.
La violencia, la seguridad, las dificultades que plantea la digitalización en determinados sectores sociales, como la de los adultos mayores, los problemas que padecen los inmigrantes para legalizar su residencia en el país, la mediación como herramienta dialógica para la solución de conflictos y su incorporación transversal en la currícula de las carreras de grado de la Universidad y la participación de estudiantes de la Facultad de Ciencias Económicas en un estudio de base científica para relevar el cumplimiento de los objetivos de la agenda 2030 para Río Cuarto, fueron los principales asuntos sobre los que se avanzó en este primer encuentro entre estos dos organismos.
“Esta es una forma de reencausar el trabajo que veníamos realizando con el Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad sobre distintos tipos de violaciones de derechos fundamentales que se producen en nuestra ciudad, sobre todo de aquellos que excluyen a las personas mayores”, señaló Rins.
“Esta reunión nos sirvió también para avanzar sobre otras líneas de trabajo, como por ejemplo la posibilidad de compartir herramientas dialógicas, como la mediación, para gestionar conflictos, tanto internos cuanto externos en el marco de la pacificación social”, resumió el ombudsman local.
Remarcó que, desde la Defensoría del Pueblo, propusieron a las autoridades universitarias coordinar acciones para “monitorear la agenda 2030 y el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible y el respeto por los derechos fundamentales”.
Rins, por otra parte, expresó durante el encuentro su preocupación por la violencia que se registra en el microescenario, es decir “en la medianería entre vecinos”, como también en el macroescenario, relacionada con “la sensación de violencia que se viven en ciertos sectores de la ciudad o incluso en toda la mancha urbana de Río Cuarto. También hablamos en esta reunión sobre los hechos de violencia que se producen en los contactos digitales, que tuvieron una escalada muy fuerte y que generan una sensación de miedo y de ansiedad que repercute directamente en la salud mental de las personas. Este es un tema que hay que abarcar desde la perspectiva de vulneración de derechos”, expresó.
Finalmente, Rins anticipó que, desde el Observatorio Permanente de Personas Migrantes, además de ofrecer asistencia a las personas que llegan a nuestro territorio nacional, también se buscará ayudar a aquellos argentinos que quieren radicarse en un país extranjero. “Este es un enfoque innovador. Hoy vemos que hay muchas personas que quieren partir hacia otros destinos y se encuentran con numerosos inconvenientes, sobre todo con la documentación”.
DIRECCIÓN DE PRENSA Y DIFUSIÓN UNIVERSIDAD NACIONAL DE RIO CUARTO