Loni Jane Anthony, australiana de 25 años, llama a su plan de nutrición 80:10:10, porque se distribuye en 80% de carbohidratos, 10 de grasas y 10 de proteínas, según ha publicado The huffington Post.
La joven ha contado a un periódico local que decidió cambiar radicalmente su alimentación después de que comenzó a sufrir diferentes problemas, como acné, caída del pelo, desajustes con la regla y hasta cambios en su estado de ánimo.
Cerró con la comida basura y se despidió de las bebidas alcohólicas frecuentes desde hace tres años.
Un día normal de Loni Jane Anthony comienza con una limonada caliente, la mitad de una sandía, un batido de plátano o varias naranjas enteras.
La comida se resume en cinco o seis mangos y para la cena se prepara una ensalada gigante. Sólo bebe alcohol una vez cada cinco meses.
"Esta dieta no fue una solución rápida para perder peso", contó la futura mamá. "Es que estaba interiormente muy enferma; me estaba matando lentamente a mí misma".
Su régimen alimenticio es seguido por 100.000 personas a través de la cuenta de Loni Jane Anthony en Instagram, donde despierta mucha curiosidad.
"¿Por qué la gente está tan interesada en mí? Estoy aquí sentada comiendo mis bananas, no soy nadie en especial."
Su dieta ya provocaba críticas cuando mostraba fotos suyas con su raquítica cintura y desató una verdadera polémica cuando contó que estaba embarazada y aun así seguía alimentándose de la misma manera.
Nutricionistas aseguran que su alimentación no es saludable y que pone en riesgo su vida y la del bebé, porque carece de proteínas y de diferentes vitaminas y minerales necesarios, como hierro, calcio y zinc.
La dieta fue creada por un médico crudívoro que rechaza que se asocie con el movimiento frutívoro, ahora en alza. (Fuente:contexto.com)