Argentina producirá verduras frescas a través de cultivos hidropónicos para lo cual se están realizando los primeros ensayos en la Antártida Argentina. El proyecto denominado Módulo Antártico de Producción Hidropónica (MAPHI) tiene como objetivo cambiar la dieta de los habitantes de la Base Marambio.
Para esto trabajan técnicos del INTA junto al Comando Conjunto Antártico, la Dirección Nacional del Antártico y la Universidad Nacional de la Patagonia Austral.
Uno de ellos es el Ing. Jorge Birgi, investigador del INTA Santa Cruz quien junto con el técnico Boris Diaz se encuentran a cargo del desarrollo del módulo hidropónicos. Jorge Alegre en su columna habitual de los días martes en La Vuelta del Perro, diálogo con uno de ellos, Jorge Vili.
“En pocos días están en condiciones de ser cosechados los primeros plantines adultos”, indicó y señaló que en esta época la Antártida registra una sensación térmica de -20º (bajo cero), una temperatura -6 (bajo cero) y con 60 km de viento.
Destacó que las semillas utilizadas en el proyecto son semillas certificadas y analizadas con los laboratorios de fitopatología del INTA Mendoza para cumplir con los protocolos internacionales que estipulan el ingreso de especies no nativas para el medio ambiente antártico.
“El sistema ya se encuentra plenamente operativo, en dos días obtendremos nuestra primera cosecha de plantas adultas con 30 días de ciclo de cultivo. Estamos haciendo hincapié en el trabajo de capacitación de la dotación militar de la Base Marambio para que pueda continuar con la producción y el mantenimiento del módulo”, indicó.
El proyecto
Técnicos del Comando Conjunto Antártico (Cocoantar) y del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) pusieron en marcha cultivos de dos variedades de lechuga, rúcula y perejil en el Módulo Antártico de Producción Hidropónica (MAPHI) instalado en la Base Antártica Conjunta Marambio, con el objetivo de abastecer de vegetales frescos a la dotación de ese emplazamiento casi inaccesible entre los meses de abril y noviembre.
El proyecto, que comenzó a producir las primeras verduras frescas a mediados de mayo a partir de una prueba iniciada para evaluar el funcionamiento y calibrar los sistemas, se espera que a fines de junio se encuentre plenamente operativo.
La iniciativa es posible gracias a la implementación de una técnica de producción en la que se cultiva sin suelo, en un medio líquido a través del cual se entregan los elementos nutritivos a las plantas; entre sus principales cualidades se destacan la eficiencia en el uso del agua, alta compatibilidad con el automatismo del proceso productivo y la optimización de uso de espacios pequeños, pudiéndose implementar la producción de los cultivos en lugares con suelos de mala calidad, baja disponibilidad de agua, o con condiciones climáticas adversas para la producción como las que presenta el ambiente antártico.
El proyecto es dirigido por el investigador del INTA y de la Universidad Nacional de la Patagonia Austral (UNPA), Jorge Birgi, con el vicecomodoro Federico Vassallo por parte del Comando Conjunto Antártico (Cocoantar) junto al suboficial auxiliar Cesar Ismael Araujo Prado, encargado de la división Prevención de Accidentes, Seguridad e Higiene y Ambiental del Cocoantar.
Entrevista: Marcelo Arbillaga y Mercedes Magnano
Producción: Carolina Chiarotto Magallanes
Operador: Andrés Berretta