Hace tiempo se hizo viral la foto de Inés que portaba un cartel en el cual señalaba que llegaba el momento de descansar y donde transmitía un mensaje lleno de cariño para sus clientes, símbolo de los negocios con muchos años de trayectoria: “Después de 53 años hoy se cierra el Bazar de la esquina. Llego el momento de descansar. Gracias a mi distinguida clientela. Éxito a los nuevos emprendedores. Inés”.

En el mismo pizarrón donde realizaba su publicidad, decidió dejar este mensaje de despedida para su clientela. Ocurrió en la Comuna Quinta Normal de Santiago de Chile.
 
Transmitía tanto esta foto que quisimos cruzar la frontera con nuestra Radio Río Cuarto y compartir con la audiencia esta linda historia.  Así es que desde Gente Necesaria nos comunicamos con Doña Inés y su hija menor.

Se trata de una mujer con un rostro muy agradable, cara de muchos amigos y rodeada de una bonita familia que la acompañó durante toda su vida.

¿Cómo recibió la repercusión internacional de esta foto que se sacó y una vecina subió en redes sociales?

Aseguró que fue bien inesperada la repercusión del mensaje porque sólo era una foto de despedida para los vecinos que pasaban en ese momento. “Una vecina consideró muy importante el mensaje y decidió compartirlo en Facebook”, recordó.
En su negocio tenía artículos escolares, regalaría, perfumes, todo lo necesario para hacer pastelería y además artículos de limpieza.

¿Cómo tomó la decisión de retirarse de la actividad?

Sobre cómo fue madurando ese momento, aseguró que le llevó años tomar la decisión y que cuando cumplió 50 año de trabajo empezó avisar a sus cercanos que se retiraría. Allí fue que decidió dejarle a su yerno e hija el “Bazar de la esquina”, quienes lo llevaron a La Serena.

“Me da satisfacción que mi negocio no murió, que siguió adelante”, indicó. Aseguró que ahora descansa, viaja y disfruta a su familia.

¿Cómo comenzó su bazar?

“Tenia deseos de superarme y quería crecer, así fue que llegué a la comuna Quinta Normal”, expresó. Con la ayuda de sus dos hijas salió adelante entre el trabajo y el estudio desde la mañana muy temprano hasta muy tarde de la noche.

Su familia y clientela siempre fueron su prioridad por esto aseguró que se repartía para comprar en distintos lugares porque lo importante era tener bien surtido al Bazar, con lo que la clientela le pedía y cuando eso no ocurría anotaba lo que faltaba para tenerlo la próxima vez.

Dijo que así fue creciendo hasta que llegó el tiempo de descasar.

“Tener el negocio me permitió conocer los vecinos, sus historias y crecimientos y eso me dio mucha satisfacción”, destacó.

Repercusión nacional e internacional

La televisión nacional estuvo cubriendo ese momento donde doña Inés se retiró de la actividad y los vecinos le hicieron un gran homenaje por sus 53 años de trayectoria. Destacó que sus vecinos fueron mis respetuosos con ella y fue muy agradable tenerlos como clientes.