El 22 de febrero se conmemora la primera vez que se izó la bandera nacional en el territorio antártico argentino, allá por 1904. En el día que recordamos al continente blanco, Agustina Larrea, periodista y coautora del libro “Antártida”, junto a Tomás Balmaceda, nos cuenta sobre los héroes antárticos y las epopeyas que no se narran en los libros de texto.
La primera vez que un argentino pisó la Antártida fue el 22 de febrero 1904, el mismo día que se izó la bandera nacional en un territorio que desde entonces nunca dejaría de tener nuestra presencia. Aquel primer hombre en el continente blanco fue Hugo Alberto Acuña, un joven bahiense de 18 años que integró la primera expedición a las islas Orcadas con el objetivo de recabar información metereológica para el Ministerio de Agricultura de la Nación.
Este antecedente, además de ser un gran aval en materia de soberanía, fue instituido el 26 de noviembre de 1974, a través de la ley Nº 20.827, publicada en Boletín Oficial 23.043, declarando el 22 de febrero como Día de la Antártida Argentina.
El mapa y el territorio: La Antártida Argentina o Sector Antártico Argentino, considerado como parte de nuestro territorio nacional, integra un área delimitada por los meridianos 25º y 74º Oeste y el paralelo 60º de latitud Sur, que forma parte del que fuera Territorio Nacional de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, establecido por Decreto-Ley Nº 2129 de fecha 28 de febrero de 1957, hoy por ley provincial.
La entrevista
Agustina Larrea es periodista y coautora de Antártida. Historias desconocidas e increíbles del continente blanco, editado por Penguin Random House. En el Día de la Antártida Argentina, la escritora nos cuenta por qué surgió la idea de editar un libro, nos recuerda los próceres antárticos y repasa las mejores anécdotas de su reciente obra.
-¿Cómo nació tu interés por la Antártida?
-Fue realmente algo muy casual, y surgió cuando estábamos investigando con Tomás para nuestro pimer libro, que se llamó Quién es la chica, que recorre las historias de grandes canciones del rock y del pop argentino. En una comida con amigos, uno de ellos nos contó una historia que desconocíamos, vinculado con el perro polar argentino. A partir de la curiosidad que se despertó en nosotros empezamos a descubrir que hay un montón de otros episodios antárticos que nos sonaban pero que no teníamos del todo claro. Fue como tironear de un hilito y empezar a encontrar un montón de personajes y aventuras que finalmente compilamos en un libro.
-¿Qué otra bibliografía existía?
-Hay escritos varios libros de memorias, crónicas de viajes y muchos libros de geografía, que en muchos casos tenían más que ver con la cuestión internacional o con investigaciones sobre los tratados y la historia de estos tratados. Con Tomás pensamos que faltaba este costado más anecdótico que contara sobre la vida cotidiana en la Antártida. El libro es una combinación entre divulgación, con la información que vimos alguna vez en la escuela y entrevistas a los grandes héroes antárticos.
-¿Qué rol cumple la Argentina en la Antártida?
-La Argentina tiene un rol importantísimo, y está haciendo pie hace muchísimos años de manera ininterrumpida, eso es muy valioso por todo el trabajo que se viene realizando en materia científica a través del Instituto Antártico, que vincula a un montón de especialidades científicas. Asimismo, todo lo que tiene que ver con nuestra soberanía también es muy valioso, ya que estamos ahí desde 1904. Desde ese año siempre hay argentinos en la Antártida. De hecho, el 22 de febrero se celebra el Día de la Antártida Argentina por rememorar la primera vez que se hizo efectiva la presencia humana en el sector antártico reclamado por nuestro país.
-¿Cómo pensás celebrar el día?
-Lo voy a celebrar trabajando mucho, ayudando a difundir el libro que escribimos con Tomás y tambièn voy a participar de un acto que organiza la Secretaría de Malvinas, Antártida y Atlántico sur que pertenece a Cancillería. Es un año por demás importante para los antárticos porque se cumplen 70 años de la primera expedición científica a la Antártida desde la Argentina, se cumplen 70 años de la creación del Instituto Antártico y además se cumplen 60 años de la entrada en vigencia del Tratado Antártico, que había sido firmado en 1959.
-¿Qué importancia tiene este continente para el mundo y para la Argentina?
-Me gustaría destacar dos cosas, una, bastante elemental y obvia, que es la reserva de agua que tiene el continente para toda la humanidad. Por otro lado, un costado tal vez menos evidente, pero que para mí es muy interesante y se vincula con la historia de la Antártida, y que es un lugar de no proliferación de guerra, de paz y de investigación, en donde los países se tienen que poner de acuerdo a partir del Tratado y tienen que convivir. De hecho lo hacen sin disputas, como puede pasar en otros puntos del planeta. En ese sentido la Antártida nos deja una enseñanza.
-¿Qué historias sobresalen en el libro?
-El libro tiene muchas historias, pero una de mis preferidas es el capítulo de la epopeya que fue la Operación 90, que sucedió en 1965. Fue la primera vez que un grupo de argentinos recorrió y llegó hasta el Polo Sur por tierra. Precisamente para el libro tuvimos la posiblidad de entrevistar a varios miembros de la expedición y al General Jorge Leal, que fue quien encabezó la operación y uno de los grandes héroes antárticos argentinos.
-¿Cómo es la historia del perro polar argentino?
-En el libro reconstruimos su historia, que es una raza, o algo así, creada especialmente para que los animales pudieran resistir el frío terrible de la Antártida. Fue una mezcla de otras razas que venían del Polo Norte, que tuvo ejemplares realmente sobresalientes, entre otras cosas porque han llegado a rescatar humanos que estaban varados en el medio del hielo o que se desempeñaron en distintas situaciones de real heroísmo. Más allá de los héroes antárticos humanos, estos perros también lo fueron.
-¿Qué otro personaje antártico mencionaría?
-Hasta que se llega a crear esa raza, hubo también unos avatares que involucraron a Perón y a Hernán Pujato, que fue el gran pionero argentino de la Antártida. El quería hacer un plan muy concreto y muy interesante, pensando en la soberanía y que la Argentina hiciera pie firmemente en ese territorio.