La estrella de Llámame por tu nombre, Armie Hammer, que completó un período de tratamiento de nueve meses en rehabilitación por sus adicciones al sexo, las drogas y el alcohol, y que aún esta implicado en la investigación que abrió la policía de Los Ángeles en base a las denuncias de varias mujeres que alegaban tendencias violentas, problemas con las drogas y canibalismo, se vio recientemente con su ex mujer, Elizabeth Chambers.

La pareja, que se había separado poco tiempo antes de que surjan las declaraciones en contra de Hammer, ha sido vista nuevamente junta en las Islas Caimán, donde el actor continúa el camino comenzado en la clínica de rehabilitación. Un fuente cercana a Chambers habría expresado a una revista norteamericana: “Obviamente tenían muchos problemas, pero la rehabilitación de Armie demostró que estaba comprometido con los grandes cambios. Se llevan bien y disfrutan pasar tiempo con los niños”. Según sus declaraciones, Chambers “siempre” quiso al actor y manifestó que es “el amor” de su vida.

El actor y la conductora de TV, que tienen dos hijos en común, Harper (7) y Ford (5), estarían intentado reconciliar lo sucedido el año pasado antes de la finalización de su divorcio. Según un medio especializado de publicación online, “se aman y están en un buen lugar. Armie, Elizabeth y sus hijos han estado frecuentando Yoshi Sushi en Gran Caimán. A menudo cenan allí juntos y parecen una familia feliz. Pero no creo que vuelvan a estar juntos. Sus hijos son su principal prioridad en este momento y eso nunca cambiará”.
Hammer, que tiene pendiente el estreno de su último film, Muerte en el Nilo, junto a Gal Gadot, había sido borrado de varios proyectos tras el surgimiento de las declaraciones en su contra. En marzo del año pasado, una mujer llamada Effie Angelova declaró que el actor la había forzado a mantener relaciones sexuales en contra de su voluntad y que había llegado a temer por su vida.

En ese momento, Chambers, que aún no había iniciado el proceso de divorcio, se mostró devastada y publicó, a través de su cuenta de Instagram: “Durante semanas, he intentado procesar todo lo ocurrido. Estoy en shock”. Y continuó: “Apoyo a cualquier víctima de ataques y de abusos y animo a todo aquel que haya experimentado este dolor a que busque la ayuda que necesite para curarse”.

Los mensajes que desataron el escándalo

“Soy 100 por ciento caníbal. Te quiero comer... Asusta admitirlo. Nunca lo admití antes. Corté el corazón de un animal vivo anteriormente y me lo comí mientras aún estaba caliente”, decía uno de los mensajes que habría recibido una de las mujeres que acusa a Hammer. “Me ‘pone’ pensar en sujetar tu corazón con la mano y controlarlo cuando palpita”, se leía en otro.

Junto con estos comentarios se habrían filtrado también capturas de pantalla de chats que mostraban que el actor le decía a una mujer que “necesitaba beber su sangre”. Tras obtener el contenido de los mensajes, la policía de Los Ángeles habría remitido el caso a la oficina fiscal del distrito local para continuar con la investigación que aún sigue en curso.

Si bien Hammer nunca admitió ser el autor de dichos comentarios, otras mujeres con las que el actor había entablado una relación empezaron a romper el silencio. Paige Lorenze y Courtney Vucekovich estuvieron entre quienes hablaron de lo traumático que fue su nexo con Hammer.

La Nación