Jorge Said es un periodista chileno que se encontraba en Afganistán cuando todo se precipitó. Se encontraba documentando el avance talibán cuando cayó Kabul. Fue uno de los últimos extranjeros en poder salir de la ciudad en uno de los últimos vuelos hacia España. El relato conmovedor de Said junto a Mabel Sánchez.
La periodista Mabel Sánchez, recibió varias llamadas un tanto desesperadas de Afganistán de Jorge Said, uno de los cineastas más grandes de Chile.
El periodista chileno se encontraba documentando el avance talibán cuando cayó Kabul. Fue uno de los últimos extranjeros en poder salir de la ciudad en uno de los últimos vuelos hacia España
Aquí el duro relato de cómo escapo en el ultimo vuelo en el que miles de afganistanes huyeron en el medio de balas y cadenas. Rescató a niñas que dejaron toda su vida atrás y a su familia en Afganistán.
“Con tres niñas, hicimos muchísimos intentos de escapar hasta que quedamos con personas rezagadas. Fue una situación dramática, entrevistamos a la periodista del canal local y luego llegaron los talibanes”, indicó en el inicio de la conversación.
En un par de horas 350 mil hombres entregaron sus armas.
Cuando me entero que estaban a pocos kilómetros salimos de una pista de aterrizaje en el medio de una salida caótica donde pasaban los camiones y la gente escapaba.
Una vez que llegué al hotel, lo primero que supimos fue que las mujeres ya no podían salir a la calle de modo occidental y empecé a llamar a muchas que había entrevistado. Algunas como la presentadora me atendieron, llevaba el burka y nos contaba que empezó a recibir amenazas y nosotros también.
Ahí surgió una posibilidad de hacer listas de personas amenazadas para entrar a aviones de rescate.
Al principio no era tan complicado, pero cuando los talibanes llegaron al poder, masivamente la gente fue al aeropuerto y creció a mas de medio millón la cantidad de personas que querían huir. Muchas no se querían ir porque no sabían a donde irse.
Los talibanes disparaban y fuimos avanzando rescatando a gente. La verdad yo creí que no iba a salir, me fui a buscar mi equipo y la gente de inteligencia nos explico por donde ir. Algunas familias retrocedieron y yo logre salir con tres niñas, me metí en unas aguas servidas, y seguí caminando así.
Yo creo que es el desastre más grande para las fuerzas armadas norteamericanas, han dejado una perdida multimillonaria de todo lo que han dejado y si bien se hizo una operación urgente hay gente que ha quedado allá.