¿Recuerdan la escena de Matrix en la que Neo se distrae de su gran lucha cuando pasa una chica en un coqueto vestido rojo? Un estudio reciente sustentó su distracción al probar que los hombres sienten que las mujeres que visten de rojo son más atractivas sexualmente.
El rojo se asocia con la fertilidad, por lo que los chicos piensan que una mujer que lleva este color está más interesada en la reproducción y por ende, en el proceso de logarla.
El poder del rojo no es nuevo. Durante milenios las mujeres hemos realzado características físicas con este color, como los labios o las mejillas, para hacerlas más atractivas al sexo opuesto.
Esto viene desde nuestros ancestros los primates, o sus primos los mandriles. Cuando una hembra está en celo sus niveles de estrógeno aumentan, lo que expande sus vasos sanguíneos enrojeciendo su cara. El rubor que los machos ven en sus rostros les indica que es momento de acercarse.
Lo mismo aplica para los seres humanos. El estudio corrió bajo la dirección de Adam Pazda, de la Universidad de Rochester en Nueva York. En estudios anteriores ya se había comprobado que los hombres se sienten más atraídos hacia una mujer vestida de rojo, independientemente de lo que traiga puesto. Es decir, el color por sí mismo atrae la mirada, no importa si es una playera o un vestido de noche.
Para entender este efecto, Pazda y sus colegas hicieron un experimento mostrándole 25 fotografías de mujeres solteras usando blusas blancas y rojas a varios chicos y tenían que responder la pregunta ¿está ella interesada en sexo? En una escala del 1 al 9.
Los hombres interpretaron los outfits rojos como una señal de que las mujeres se encontraban más dispuestas a tener encuentros sexuales. La calificación entre un color y otro variaba de 1 a 1.5 puntos más alta cuando usaban una prenda roja.
Está comprobado que los hombres se sienten más atraídos hacia mujeres que se presentan más dispuestas a tener sexo que a aquéllas que parecen indecisas o esquivas. Por eso se sienten más atraídos hacia las mujeres que visten de rojo.
La conclusión para nosotras es que debemos sacarle ventaja al rojo. Algunos cambios sutiles en nuestro clóset pueden significar impactos muy positivos para nuestra vida.