La pandemia de coronavirus alteró el mercado aerocomercial y generó rarezas difíciles de ver en un escenario de normalidad. En mayo, por caso, una empresa de vuelos privados fue la que más operaciones realizó dentro del país , superando incluso a Aerolíneas Argentinas, que antes de la virtual paralización del sector tenía el 80% de los vuelos internos.
Se trata de American Jet, una empresa especializada en vuelos privados, que tiene como principales clientes a empresas petroleras y mineras, a las que brinda servicio de transporte de personal. La empresa fue fundada hace 36 años por el empresario Jorge Rodríguez, presidente de la compañía y socio mayoritario.
Según los registros de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), American Jet realizó 50 vuelos en mayo, tres más que Aerolíneas Argentinas -que realizó algunos servicios de repatriaciones internas- y se quedó con el 11% del total de vuelos realizados, por encima de la aerolínea de bandera, que acaparó el 10%. Sin embargo, si se considera la cantidad de pasajeros transportados, esa ecuación se invierte: registró solo el 7% de la cuota, contra el 78% que sumó Aerolíneas Argentinas en cabotaje.
Según explicó a LA NACION Sabrina Roszuk, gerenta comercial de la firma, como las actividades vinculadas al sector de petróleo, gas y minería estuvieron incluidas dentro de la lista de servicios esenciales desde abril, muchas empresas "duplicaron el volumen de los vuelos privados que hacían para poder cumplir con el recambio de personal".
Empresas que solían enviar a su personal a las zonas de explotación con líneas aéreas regulares, por ejemplo, se quedaron sin esa posibilidad y tuvieron que recurrir a un chárter. Ese fue el caso también, según cuenta, de una empresa naviera que debía relevar a su tripulación en un puerto del sur.
"También están aquellas empresas que solamente enviaban en vuelos privados a los sitios de extracción al personal jerárquico o de ingeniería y que ahora mandan al 60% de su personal para asegurarse que pueden hacer el relevo de turnos, que en el caso de los petroleros es cada 15 días", explicó.
Otro factor que afectó es que algunas empresas reunían en Buenos Aires a su personal disperso en todo el país para recién después abordar en grupo un vuelo privado hacia el destino final y ahora, en cambio, la empresa debe recolectarlos uno a uno por sus provincias para llevarlos luego a destino. "A veces por la cantidad de horas que lleva ese recorrido -que puede empezar por el norte y terminar en Perito Moreno- necesitamos cambiar la tripulación y por eso se contabiliza como más de un vuelo", detalla la ejecutiva.
Sin embargo, Roszuk asegura que no están volando más que antes de la cuarentena, sino que cambió la composición de la demanda y los nuevos pedidos compensan parcialmente las bajas que registraron de empresas como YPF y Chevron que, según explica, están volando 20% menos porque operan con guardias mínimas.
"Volamos bastante menos que antes, y no es fácil. Somos una empresa privada, unipersonal, de capitales privados y tuvimos que ajustar las tarifas y reorganizar los turnos del personal para poder seguir sustentando la estructura. La rentabilidad no es la misma que en otras oportunidades", sostuvo Roszuk.
Los destinos más frecuentes de la empresa responden a la localización de las actividades que atienden y son Mendoza, Neuquén, Comodoro Rivadavia, Perito Moreno y Puerto San Julián, entre otros. Las aeronaves que se usan son dos Embraer y un ATR de 50 plazas; cuatro Metro 23 y un Dornier 228 de 19 plazas y un Lear Jet de ocho plazas.
Según explicó la ejecutiva, la empresa está dentro de un listado de empresas que trabajan para pasajeros exceptuados de la cuarentena obligatoria pero, además, exige que cada pasajero haya tramitado su propia autorización para circular antes de solicitar el permiso para volar a la ANAC.
En cada viaje se aplica el protocolo sanitario correspondiente de la provincia a la que se vuela y, dentro del avión, se suma el protocolo de seguridad que la empresa contratista considere oportuno a lo dispuesto por American Jet: se viaja con guantes, barbijo y máscara plástica y no se ofrecen servicios de catering.
En agosto pasado la empresa anunció que incorporaría dos aeronaves a su flota y se lanzaría al mercado de los vuelos comerciales regulares para ocupar su capacidad ociosa explotando con aviones pequeños rutas de baja densidad. En enero inauguró su ruta Buenos Aires - Termas de Río Hondo para el público general, con la presencia del ministro de Transporte, Mario Meoni.
Por: Delfina Torres Cabreros
La Nacion