El
ministerio de Industria, Comercio y Minería en conjunto con el de Trabajo y de Salud establecieron un protocolo de control sanitario industrial.
El restablecimiento progresivo de la actividad productiva exigirá un control sanitario exhaustivo, es por ello que, tomando como base el protocolo establecido por el Centro de Operaciones de Emergencia de la Provincia, las recomendaciones del Ministerio de Salud, los manuales de Buenas Practicas y la experiencia de industrias líderes de Córdoba, se ha dispuesto una serie de acciones tendientes a acompañar la reactivación económica d Córdoba tras la inminente salida del confinamiento obligatorio.
Normas que regulan la bioseguridad del sector industrial
Las normas de bioseguirdad deben ser reforzadas en empresas que se encuentran en actividades e instrumentadas obligatoriamente en empresas que ingresa en actividad pos cuarentena.
Identificar, separar y excluir los trabajadores incluidos dentro del grupo de riesgo.
Implementar turnos de 15 días, separando grupo de trabajadores (concepto de cuarentena).
Controlar la temperatura en los ingresos de las fábricas (arco, pistola, termómetros, etc.).
Instrumentar normas o protocolo de bioseguridad dentro de las industrias y los puestos de trabajo.
Identificar ciudades con alta potencialidad de contagio y trabajadores que viven en barrios con detección viral.
Monitoreo, control y seguimiento por parte de los ministerios de Industria, Comercio y Minería, de Trabajo y de Salud.
Protocolos y normas de bioseguridad para la industria
La Secretaría de Industria insta al sector productivo de la Provincia a tomar las debidas recomendaciones en materia de bioseguridad a efectos de mitigar al máximo la propagación del COVID-19 en el marco del restablecimiento progresivo de las actividades económicas.
El conjunto de medidas y normas comprende:
Verificación del personal disponible. Registro de antecedentes, control y seguimiento
Movilización del personal hacia el lugar de trabajo y organización de la jornada laboral.
Adecuación de las instalaciones y puestos de trabajo.
Empleados en planta productiva.
Proveedores, clientes y transportistas.
Sector de compras, ingeniería, comercial y administración.
Recomendaciones generales a todas las líneas de trabajo.
Comunicación y concientización para personal, proveedores y otros actores de la cadena.
Plan de actuación ante la detección de un caso sospechoso y/o la confirmación de un empleado infectado de COVID-19.