El ciclo lectivo 2020 debuta este lunes con clases para la mayor parte de la matrícula escolar pero con la sombra de huelgas en seis provincias, donde los mandatarios no lograron cerrar aún un acuerdo salarial con los gremios pero negocian contra reloj para diluir la conflictividad, con mediación activa ya del Gobierno nacional.

En distritos grandes como Buenos Aires, CABA, Córdoba y Mendoza no habrá este año paros en el regreso a las escuelas en los niveles inicial y primario, lo que inclina la balanza hacia un retorno a las aulas más auspicioso que en años anteriores. Una foto ligada al guiño de buena parte de los gremios nacionales hacia el debut de Alberto Fernández, de la mano de la sintonía política y la contención brindada por el retorno de la paritaria docente nacional, eliminada por Mauricio Macri.

El Presidente amplificó este domingo esa postal en su discurso ante la Asamblea Legislativa, al valorar que se iniciarán las clases “en casi todo el país” y hacer hincapié en que “hay que educar para que haya futuro”.

El lote de distritos con paros este lunes incluye a Chubut, Santa Fe, Santa Cruz, Jujuy, Neuquén y Entre Ríos. En Tucumán, una huelga de 48 horas fue frenada por una conciliación obligatoria dictada por el peronista Juan Manzur, mientras que en Santa Cruz Adosac desoyó una medida similar de Alicia Kirchner.

El ministro de Educación nacional, Nicolás Trotta, destacó que “va a haber un masivo inicio de clases”, e hizo foco en los distritos con falta de acuerdo. "Estamos monitoreando la realidad de las jurisdicciones donde hay situaciones de conflicto; creemos que con el diálogo que tengamos lunes, martes y miércoles podremos normalizar el ciclo lectivo en cada escuela del país”, dijo, tras asistir a la apertura de sesiones en el Congreso, y en la previa a su desembarco este lunes en Formosa para dar el puntapié inicial al retorno a clases con Gildo Insfrán.

Según aseguraron desde despachos nacionales a Ambito Financiero, se trata de una suerte de “mediación” del Ministerio de Educación en esos distritos, que apunta a acercar posiciones entre gobernadores y gremios y que no involucra la posibilidad de destrabar fondos nacionales adicionales, más allá de los acordados en la paritaria docente federal (el Fondo Nacional de Incentivo Docente y las cuatro sumas fijas extraordinarias de 1.210 pesos, entre abril y julio).

En filas del Palacio Sarmiento consideraron ante este diario que el diálogo en Santa Fe y Entre Ríos está “bastante encauzado”, mientras que en Chubut el esfuerzo está puesto en intentar acercar a las partes, aunque -destacan- el nivel de acatamiento ya muestra “una baja sustantiva”.

El caso chubutense es el más grave: tras un 2019 azotado por 17 semanas de huelga, el distrito que comanda Mariano Arcioni debía volver a las aulas el pasado miércoles, pero los sindicatos dictaron un paro de 72 horas (no fue acatada una conciliación), y extendieron ahora la medida otras 72 horas desde este lunes, en rechazo a los retrasos salariales y en reclamo de una suba 2020.

En Santa Cruz, Santa Fe y Neuquén, en tanto, la medida de fuerza llegó tras el rechazo a las ofertas de los peronistas Alicia Kirchner y Omar Perotti, y Omar Gutiérrez (MPN). En tierra entrerriana, no hubo propuesta oficial aún del gobierno de Gustavo Bordet y la cita paritaria está prevista para el viernes, tras el paro de 72 horas desde este lunes de Agmer. La propuesta pende también en Jujuy, por parte del radical Gerardo Morales.

“Queremos mantener un diálogo abierto, priorizando el comienzo de clases; ésto nos obliga a plantearnos cómo le ofrecemos a los maestros una propuesta similar a la que están ofreciendo el resto de las provincias”, dijo Perotti, tras el rechazo a una suba del 3% y $ 897 para material didáctico, que derivó en un paro de 48 horas desde este lunes. En tierra neuquina, en tanto, no alcanzó que Gutiérrez reeditará el uso del gatillo -una rareza en el contexto nacional- y Aten parará 48 horas desde este lunes.

El miércoles el Gobierno de Fernández había arribado a un acuerdo con los cinco gremios con representación federal. Allí se acordó una suba del piso salarial (pasó de $ 20.250 a $ 23.000 desde ayer, y a $ 25.000 desde el 1 de julio, con una suba del 23,5%) y el pago de las cuatro sumas fijas. Además se definió un nuevo llamado antes del 31 de julio.

Ese entendimiento desató un raid de febriles negociaciones en las provincias, y un mapa partido:

-un lote cosechó acuerdos, con estrategias basadas -en línea con la Casa Rosada- en entendimientos cortos, con nuevos llamados a mitad de año y (en general) sin cláusula gatillo. Ese grupo incluye a Axel Kicillof, a Horacio Rodríguez Larreta, al misionero Oscar Herrera Ahuad (fue el primero) y al chaqueño Jorge Capitanich (quien, como Gutiérrez, apeló al uso del gatillo).

-otras aún no arribaron a un acuerdo. En algunas habrá este lunes paro, mientras que en otras las negociaciones avanzan sin huelgas, como en Córdoba.

Ámbito Financiero