"Siempre elegí el bajo perfil por respeto a mi familia", declaró Luis Novaresio ​(55) en más de una oportunidad al referirse a su vida privada. Sin embargo, en septiembre último, el reconocido periodista confirmó su noviazgo con el empresario inmobiliario Braulio Bauab.

Así, el conductor de Debo decir (América, domingos a las 22) comenzó poco a poco a hablar de su vida sentimental y esta elección de dar a conocer su orientación sexual a los 55 años. "Fue una forma de decir 'está todo bien, aflojemos con las especulaciones'", indicó al respecto.

Durante este sábado en su visita a PH: Podemos hablar (Telefe, a las 22) volvió a hablar de su vida privada y recordó un episodio por demás triste y repudiable que sufrió debido a su elección sexual apenas comenzaba su carrera en los medios.

Todo comenzó cuando Andy Kusnetzoff (49) les pidió a sus invitados "que supieron alejarse de aquello que les hacía mal" que dieran un paso al frente. Entonces, Novaresio se adelantó al "punto de encuentro" y reconoció que se había alejado "del prejuicio y la culpa".

"Yo era bastante más prejuicioso y más culposo de lo que creía. Vino este cambio, esta salida del closet que me tiene muy contento y muy feliz”, se sinceró.

Además, el presentador rosarino habló de cómo sus palabras habían ayudado a otros y recordó varias historias de sus seguidores que le escribieron en las redes para agradecerle por eso.

"En algún momento, en Rosario, lo llegaron a usar para amenazarte, eso me parece tremendo", introdujo el tema Kusnetzoff. "Eso fue en plena nota, no lo nombro porque se murió", comenzó diciendo el periodista.

Y continuó: "Fue un intendente de cerquita de la ciudad de Rosario al que yo denuncié con pruebas y efectivamente era ñoqui en la Cámara de Diputados y tenía a tres de sus familiares en la Cámara".

"Entonces yo le digo 'yo sé...', y el tipo me dice 'si yo cuento lo que yo sé de usted'. Yo tenía veintipico, y quedé paralizado, no pude seguir la nota. Yo tengo 55, hace 30 años atrás", recordó con pesar Novaresio.

En tanto, minutos antes, cuando Andy le preguntó cuál era su miedo de blanquear su condición sexual, él contestó: "Quienes trabajaron conmigo lo tenían totalmente claro, nunca careteé esta historia".

Sin embargo, reconoció que en todos estos años él sintió que tenía que dar "un doble examen de que podía ser más o menos inteligente, más o menos talentoso, pero aparte, como el tipo es gay, tenía que dar un nuevo standard". "La verdad es que no fue así", completó agradecido y feliz de esta nueva etapa en su vida.

Foto portada: Marcelo Carroll