Al menos 42 estudiantes murieron en un ataque contra la facultad de Agricultura en Gujba, en el estado nigeriano de Yobe, en el noreste del país, informó el portavoz militar Lazarus Eli, quien acusó al grupo armado vinculado con Al Qaeda, Boko Haram.
Según el relato policial, durante la madrugada del domingo varios hombres armados irrumpieron en la Escuela de Agricultura de la Universidad del estado de Yobe y comenzaron a disparar contra los estudiantes que viven dentro de la facultad.
Los atacantes fueron a traves de los dormitorios, donde se encontraban durmiendo los alumnos, y luego incendiaron las aulas.
Más de mil estudiantes lograron escapar, informó el comisario de la Policía estatal, Sanusi Rufai, citado por la agencia de noticias ANSA.
Los responsables de la facultad acusaron a las autoridades por la masacre.
"Nos habían prometido que garantizarían la seguridad de nuestros estudiantes, pero no fue así", afirmó un docente, que pidió permanecer en el anonimato por miedo a represalias estatales.
Los responsables de la escuela habían pedido un refuerzo de la seguridad luego que varios centros educativos en la zona fueran atacados, presuntamente por el grupo armado islamista Boko Haram.
La escalada de la violencia en esa región nigeriana comenzó el 16 de mayo pasado, cuando el gobierno declaró el estado de emergencia y militarizó los estados de Yobe, Borno y Adamawa, todos ellos en el noreste del país, y lanzó una "ofensiva antiterrorista".
La ofensiva tiene un sólo objetivo: destruir al grupo islamista radical Boko Haram, cuyo nombre se traduce como "la educación no islámica es pecado".
Desde 2009, cuando la Policía asesinó a su líder, Mohamed Yusuf, Boko Haram mantiene una sangrienta campaña contra el gobierno y las transnacionales que operan en el país.
El saldo de muertos ya asciende a más de 3.000, según cifras del Ejército nigeriano.
Pero desde que el gobierno central decretó el estado de emergencia en la región, la violencia creció exponencialmente.
En julio pasado, en el poblado de Mamud presuntos milicianos de Boko Haram atacaron el dormitorio de una escuela y mataron a 42 personas, la gran mayoría de ellas estudiantes.
Pocas semanas antes, 13 alumnos y profesores habían muerto en un ataque similar contra una escuela en el estado limítrofe de Kano.
Para el gobierno los sucesivos ataques demuestran la "desesperación" de los milicianos islamistas ante el avance del Ejército, sin embargo, estos argumentos no convencen a todos en Nigeria.
"No se puede resolver el problema con la fuerza militar, no estamos en guerra, no estamos combatiendo al invasor. El problema es político, social, económico y se necesita un acercamiento para resolverlo", aseguró el ex jefe del estado mayor Martin Luther Agwai en una charla universitaria en la ciudad de Jos.