El economista que se destaca por sus participaciones televisivas tiene una rica historia con todo tipo de condimentos.
Javier Milei (48) se convirtió en un auténtico personaje mediático. Llegó a la televisión como un experto economista, pero a pura verborragia se convirtió en una figura cotizada por cualquier ciclo televisivo (desde los humorísticos hasta de espectáculos, sin dejar los políticos) que le soporte sus explosiones, descalificaciones y exabruptos.
Así es como semana tras semana se generan nuevos episodios mediáticos con Milei como protagonista. En las últimas hubo dos... Por un lado se enfrentó en Intratables (América) con Nito Artaza, a quien trató de "fascista" y "nazi"; y por otro se enfureció con Mariano Iúdica por una imitación suya que el humorista Claudio Rico realizó en Polémica en el bar (América, a las 20).
Pero detrás de este personaje de extraño look que él muestra en pantalla hay toda una historia: una dura infancia y una relación quebrada con su padre, quien le propició violencia física y maltrato psicológico durante años.
Nacido en el barrio de Palermo y criado en Saenz Peña, en Tres de Febrero, la golpiza que marcó a Milei llegó a los 11 años, el 2 de abril de 1982. En plena Guerra de Malvinas, el pequeño Javier expresó en voz alta el sin sentido del conflicto y la abrumadora ventaja del ejército inglés por sobre el argentino, algo que enfureció a su padre, colectivero de profesión.
"Empezó a pegarme trompadas y patadas. Me fue pateando a lo largo de toda la cocina. De grande dejó de pegarme para infligir violencia psicológica", contó el economista en una nota con Perfil.
A sus 18 años, cuando tomó la decisión de estudiar economía en la Universidad de Belgrano, su padre nunca lo aceptó. "Siempre fue muy despectivo para mi carrera, siempre me dijo que era una basura, que me iba a morir de hambre y que iba a ser un inútil toda la vida", recordó en una de sus visitas a Debo Decir, el programa de Luis Novaresio en América. Desde ese entonces, la relación con su padre y su madre -a quien considera cómplice de las acciones de su padre- es nula.
Fútbol y Rock & Roll
Milei guarda un pasado como futbolista profesional y líder de un banda de rock, dos facetas de su vida que lo enorgullecen.
Su acercamiento a Chacarita llegó de la mano de su abuelo, que lo llevaba a la cancha. A los 14 empezó a jugar en las inferiores del Funebrero, siempre como arquero. "Estilo Pato Fillol", se definió una vez, siempre con la moral en lo más alto. Compensó su 1,78 metro de altura con fuerza de piernas y completó todas la inferiores, incluso llegó a integrar el plantel profesional, pero hasta ahí llegó su carrera futbolística.
Corría 1989 y en plena hiperinflación descubrió la pasión por la economía. Así recordó ese cambio en una entrevista con la revista Paparazzi: "Veía que los precios subían y que la gente se abalanzaba sobre la mercadería. Y la solución de dignidad me dijo que dejara el fútbol y me pusiera a estudiar. Dejé el deporte por completo y, mientras estudiaba, tuve una banda de rock por un par de años, hasta que no me dio más la garganta y dejó de divertirme".
Everest se llamaba la agrupación que Milei lideraba. Hacían algunos temas propias y covers de The Rolling Stones, su banda favorita (Elvis Presley es su otra debilidad musical). Hoy continúa con la idea de formar un nuevo grupo de temas que combinen bases rockeras con letras sobre economía.
Explosión televisiva
En 2014, plena era kirchnerista, Milei editó junto a su colega Diego Giacomini, Maquinita, infleta y devaluta, su primer libro. Eran tiempos en lo que Milei se encontraba desplazado en el mundo académico por su prédica liberal y apenas algunos medios les publicaban sus artículos. Hasta que le llegó la gran oportunidad en Hora Clave, el histórico ciclo de Mariano Grondona. "Así fue la primera vez de Javier Milei, el economista nivel Dios", es el título con que se puede encontrar en YouTube a aquel gran debut televisivo en 2015.
Milei se presentó como el economista libertario, adscripto a la escuela austríaca del pensamiento económico, y disparó sin concesiones contra Axel Kicilloff, por entonces ministro de Economía de Cristina Kirchner, y toda la clase política, un clásico en su discurso. "Ese día estaba enchufado. Metí frases que fueron trending topic. Fue tremendo, a partir de ahí me empezaron a llamar de varios lugares", destacó tiempo después en una nota con El Confidencial.
A partir de ahí le llegó la invitación a Animales Sueltos (América), su primera participación en un ciclo de aire en la que mostró su furia criticando la teoría económica de John Maynard Keynes. Desde entonces, Milei se empezó a convertir en una figura, acumulando participaciones en variados programas, charlas por todo el país, nuevos libros, obras de teatro, pedidos de selfies en la calle... Un auténtico rockstar.
"El heredero de Adam Smith. El Mozart de la Economía. El Demoledor de Keynesianos". Son algunos de los apodos que le otorgaron en este tiempo sus seguidores, capaz de festejarle todas sus teorías y defenderlo en sus polémicas.
Enfrentamientos y exabruptos
El primer gran escándalo que protagonizó el economista ocurrió a mediados de 2018, en Salta, cuando maltrató y llamó "burra" a una periodista local, que le preguntó sobre el éxito de la teoría de Keynes en los Estados Unidos, durante una conferencia. "No soy totalitario, solamente estoy diciendo que sos una burra. Te ponés a opinar de cosas que no sabés un carajo", le dijo, ahorrándose todo tipo de diplomacia.
Milei subestimó y descalificó a la joven salteña y, frente al enojo de parte del auditorio, se negó a pedirle disculpas. Algo que se repitió en entrevistas en distintos programas, frente a la acusación de violencia de género.
De denigrar a las mujeres es algo de lo que siempre lo acusa Sol Pérez, con quien Milei suele tener intensos enfrentamientos. Quizás el más fuerte ocurrió en Las rubias + uno, el ciclo que conduce Marcela Tinayre por NET, que llegó al punto que la hija de Mirtha Legrand despidió del aire al economista por faltarle el respeto a su panelista, que quebró en llanto en plena discusión.
Marcos Peña es otro de los nombres que hace enfurecer a Milei. "Parásito", "Inútil" y hasta "socialista" son algunos de los calificativos que le dedicó al actual jefe de Gabinete del gobierno de Mauricio Macri.
Conan, su único compañero
A los 33 años, Milei sufrió una importante crisis. Sin trabajo, llegó a pesar 120 kilos. En ese momento, solo contó con la compañía de Conan, su perro, un mastín napolitano de 90 kilos. "¡Está a la misma altura que yo y es más importante que cualquier persona! Nadie le disputa ese lugar", llegó a decir.
Una nueva explosión mediática de Milei llegó en 2018, cuando en su paso por PH: Podemos Hablar (Telefe) contó sus experiencias sexuales, habló de tríos, de sexo tántrico y explicó su apodo en la intimidad: "Vaca Mala". "En el tantra quien tarda menos de 45 minutos es considerado un eyaculador precoz", explicó ese día, sin ponerse colorado.
"La paso bien, no me quejo. En general, las novias me duran dos meses. Me di cuenta de que cada vez que conocía a alguien que me atraía tenía un conjunto de sensaciones que, en realidad, son reacciones químicas, que después disminuyen. Cuando entendés esa lógica, disfrutás de los químicos sabiendo que es eso y no dejás de mirar costos y beneficios a rajatabla. Y nunca superé esa etapa", le dijo a Paparazzi sobre su relación con las mujeres, a quienes prefiere divorciadas y con hijos.
Con quien estuvo cerca de un año fue la cantante Daniela, que -desmayo mediante- recientemente anunció su separación. "Me gusta cómo habla. Es una persona que me da mucha confianza, es muy inteligente. Y por sobre todas las cosas tiene un gran sentido del humor: me hace reír mucho, y eso es muy importante en la vida", lo elogió la intérprete de Amor sincero, tema conocido por su estribillo "Endúlzame que soy café...", el día que oficializaron su romance. Pero, por una cuestiones de tiempos, como ambos explicaron, la relación no prosperó y Milei volvió a contar con Conan como único aliado.