En la apertura del mercado había subido $ 15 pesos en los bancos privados. En el mayorista aumentó 17% y llegó a $ 53. Riesgo país trepa 1,9%.
El tsunami que el domingo impactó en la política argentina arrasó el lunes con el mercado. Tras la enfática victoria de Alberto Fernández en las PASO se impuso la dolarización de carteras y el dólar llegó a subir 30% en las primeras horas de la mañana, aunque luego fue recortando el alza y terminó con un aumento del 20% que lo llevó a cerrar a $ 57,30 en el mercado minorista, un alza de $ 13 con relación al viernes.
En un día con caídas feroces de las acciones y bonos argentinos, que la divisa no cerrara más allá de los $ 60 fue consecuencia del cambio de estrategia del Banco Central, que por primera vez desde el 26 de abril salió a vender en el mercado de contado y colocó US$ 105 millones a través de tres licitaciones.
Las intervenciones del Central lograron bajar la espuma del alza de la divisa, que en el mercado mayorista, donde operan los bancos y las grandes empresas, llegó a tocar los $ 62. El Central intervino cinco veces inyectando dólares al mercado. Dos de esas intervenciones son las que viene haciendo habitualmente: dos tramos de licitaciones de US$30 millones cada una, que Guido Sandleris hace por cuenta y orden del ministerio de Hacienda.
Pero este lunes, además, el Central salió a vender dólares de sus propias arcas. Lo hizo en tres licitaciones: dos de US$ 50 millones y una última de US$ 5 millones. Recién al final logró que la divisa se aplacara en el mayorista y terminara en $ 53, 17% por encima del registro del viernes.
En el minorista el cierre fue dispar, con bancos privados ofreciendo el billete a $ 60 y el Nación vendiendo a $ 55. Para el Banco Central el promedio del cierre fue de $ 57,30. Pero a lo largo de la jornada hubo picos en los que la moneda norteamericana llegó a tocar los $ 66 en algún banco extranjero.
El Central completó su intervención en el mercado con un fuerte ajuste de la tasa de las Leliq que la llevó a 74,9%, 10 puntos porcentuales más que el viernes. Pero con el dólar desatado, esta suba de tasas logró captar poco interés por parte de los bancos. Apenas $ 97.000 millones, contra $ 368.000 millones del viernes, cuando el mercado confiaba ciegamente en que el gobierno saldría bien parado de las PASO.
El pánico del mercado se extendió al mercado bursátil y el índice Merval se derrumba 35% en la bolsa porteña, con casi todo el panel en rojo y picos de 47% de baja para papeles como Edenor.
En sintonía, las acciones y los bonos argentinos que cotizan en Nueva York se desploman con caídas de hasta 60% para bancos como el BBVA y el Galicia, mientras que los bonos bajan hasta 8%. Así, el riesgo país, que mide la sobretasa que Argentina paga para endeudarse, subió 1,9% se ubica en 876 puntos básicos.
En una jornada complicada, los sitios de homebanking de varias entidades están caídos, lo que dificulta las operaciones. El volumen negociado fue de US$ 550.000 millones.
El viernes, la divisa se había mantenido estable, con una cotización promedio de $ 46,57 para la venta, según los datos oficiales del Banco Central.