El presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda, Luciano Laspina, confirmó que el oficialismo dará marcha atrás con la reforma que había planteado originalmente en el proyecto de Presupuesto 2019 que dejaba sin opción de seguir trabajando a quienes quisieran acceder a la Pensión Universal para los Adultos Mayores (PUAM).
El Gobierno tenía previsto restringir el acceso a esta prestación, equivalente al 80% de la jubilación mínima, de manera tal de impedir que personas beneficiarias pudieran tener un ingreso extra.
Se trataba de una restricción sensible, ya que el régimen de PUAM permitía a los beneficiarios seguir haciendo aportes a la seguridad social hasta completar la cantidad de años requeridos para acceder a un haber jubilatorio ordinario.
Presionado por las críticas, finalmente el oficialismo dio el brazo a torcer y concedió que monotributistas sociales puedan seguir percibiendo la PUAM, aunque condicionado al resto de los requisitos socioeconómicos para personas de más de 65 años.
Por otra parte, Cambiemos también aceptó dar un volantazo respecto de su pretensión inicial de incorporar a cooperativas y mutuales al régimen de pago de impuesto a las Ganancias.
En cambio, se incluirá en el Presupuesto un impuesto especial al patrimonio con una alícuota progresiva, que dejará exentas a las pequeñas y medianas cooperativas y mutuales.
Durante la reunión de la comisión de Presupuesto y Hacienda, Laspina explicó que la idea es generar un "mínimo patrimonial", y estimó que de las 1400 cooperativas del país, "más de 1200 no van a pagar el impuesto especial al patrimonio".
Otro cambio significativo en el dictamen de Presupuesto es que se incluirá una partida de refuerzo para el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de 500 millones de pesos.