El Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil acató el sábado el pedido del Partido de los Trabajadores (PT) y abrió una investigación contra la campaña presidencial del ultraderechista Jair Bolsonaro, por supuesto abuso de poder económico y uso indebido de los medios de comunicación.

El PT pidió en la víspera del balotaje una investigación en la Corte Electoral, después de que el diario "Folha de Sao Paulo" publicara que un grupo de empresarios financia de manera ilícita una red criminal que envía millones de mensajes mentirosos por WhatsApp con ataques al PT y su abanderado, Fernando Haddad.

En su decisión, el magistrado Jorge Mussi estableció que Bolsonaro deberá manifestarse sobre las acciones denunciadas por el periódico en hasta cinco días, pero negó los pedidos de registro y allanamiento en las empresas que, según el PT, estarían por detrás de la supuesta financiación ilegal de la campaña del ultraderechista.

Según juristas, la práctica sería ilegal, pues se trata de donación de campaña de empresas, lo que es prohibido por la legislación electoral, y, de ser comprobada, la candidatura de Bolsonaro podría ser inhabilitada por abuso de poder económico y crimen electoral.

También este viernes, la fiscal general de Brasil, Raquel Dodge, solicitó que la Policía Federal investigue si empresas de tecnología de la información estarían diseminando de manera sistemática noticias falsas, "referentes a los dos candidatos que disputan la segunda vuelta de las elecciones para presidente". Según Dodge, el uso de recursos tecnológicos para difundir "informaciones falsas u ofensivas" en las redes sociales podría interferir en la opinión de los electores.

En medio de la disputa política y judicial, los operadores de Twitter y WhatsApp en Brasil informaron que bloquearon "centenas de miles de cuentas durante el período de elecciones en Brasil".