El trabajo principal de esta molécula es ayudar a transportar ácidos grasos a las mitocondrias; en efecto, ayuda a proporcionar energía a las células.

ALC

En el estudio, al comparar los niveles en sangre de 71 personas deprimidas y 45 personas sanas, se descubrió que los niveles de ALC eran significativamente más bajos en los que sufren de depresión. No solo eso, sino que cuanto más deprimido estaba el individuo, menores eran sus niveles de ALC.

De los 71 individuos deprimidos en el estudio, 43 fueron diagnosticados con depresión severa. Curiosamente, estas personas muy deprimidas tenían los niveles más bajos de ALC y tenían mayor probabilidad de tener depresión resistente al tratamiento, de haber sufrido trauma o abuso infantil, y de ser mujeres (probablemente porque la depresión ocurre más a menudo en las mujeres que en los hombres).

Debido a que los niveles de ALC se correlacionan con la presencia y la gravedad de la depresión de los pacientes, la medición de ALC en la sangre puede ayudar a los psiquiatras a determinar quién está en mayor riesgo y ayudar a desarrollar un plan de tratamiento. De hecho, proporcionar suplementos ALC a pacientes deprimidos podría representar un método de tratamiento crítico.

Con todo, todavía está por ver si estos suplementos de ALC tendrán efectos positivos en humanos. En caso afirmativo, cCuál es la dosis, frecuencia y duración apropiadas? Tenemos que responder muchas preguntas que requerirán ensayos clínicos controlados a gran escala. Crucemos los dedos.