Sudáfrica no sale de la conmoción por una beba recién nacida que fue abandonada a su suerte en una alcantarilla. Un hecho que preocupa y conmueve al mundo entero.
Una fotografía de la pequeña tirada en un drenaje de la ciudad de Port Elizabeth se viralizó. Pero detrás de esa imagen, hay una historia milagrosa que emociona. Charmaine Elizabeth Keevy, una mujer de 63 años, fue la heroína.
Salió a dar un paseo con su perro y cuando éste comenzó a ladrar, vio a la beba abandonada y rodeada de hormigas rojas. Su estado era realmente deplorable. No dudó un segundo en sacarla de ese lugar y trasladarla al hospital con la ayuda de un hombre que pasaba por allí.
Los médicos le diagnosticaron hipotermia y problemas respiratorios. Aún tenía el cordón umbilical. Pero la realidad es que se convirtió en una verdadera luchadora y está recuperándose poco a poco.
Los profesionales la bautizaron con el nombre de Grace April. Ahora buscan una familia que la pueda cuidar y le entregue todo su amor. Mientras, las autoridades investigan qué pasó con su mamá biológica.