Luego de que ingresara un pliego de licitación al Concejo Deliberante para
instalar 80 cámaras de seguridad en la ciudad y crear una central de monitoreo, comienzan las dudas sobre la eficacia que tendrán esos dispositivos para mejorar la seguridad.
Franco Altamirano, concejal de Respeto, planteó que el proyecto “es bueno” y “ambicioso”, aunque deslizó que es “mucho dinero que el Municipio va a destinar por mes a su funcionamiento”.
Anteriormente, el Gobierno municipal hizo un análisis sobre los resultados que tuvieron las cámaras en otras localidades. Sobre esta línea, Altamirano comentó que consultaron al oficialismo si los aparatos incidían en la seguridad real y si bajaron los índices de hurtos o venta de drogas. “No nos dieron una respuesta acabada”, expresó el edil.
Además, consideró que preguntaron sobre los parámetros que se utilizarán para ubicar las cámaras, pero dijo que es una decisión que tomarán desde la departamental policial.
Por otro lado, el concejal manifestó que sería ideal que las cámaras sean adquiridas por la Municipalidad y no alquilarlas como establece el pliego de licitación. “Es dinero que quedaría en la ciudad. Empezar a municipalizar algunos servicios va a ser conveniente para la comunidad en general”, completó Altamirano.