En medio de una crisis institucional, 18 millones de venezolanos eligen hoy gobernadores para las 23 regiones del país caribeño. El presidente Maduro advirtió de que los mandatarios electos que no juren sus cargos ante la polémica Asamblea Constituyente no podrán asumir.
Los venezolanos eligen hoy 23 gobernadores regionales, en medio de la tensión generada por la advertencia del presidente Nicolás Maduro de que los ganadores que no reconozcan a la controversial Asamblea Constituyente quedarán fuera de sus cargos.
Más de 18 millones de electores están habilitados para participar en los comicios regionales, que se realizan dos meses y medio después del fin de las protestas contra el Gobierno, que entre abril y julio dejaron más de 100 muertos.
La oposición tiene el reto de revertir el actual panorama, en el que el oficialismo tiene el control de 20 de las 23 gobernaciones, luego de que en las legislativas de diciembre de 2015 el antichavismo obtuviera una clara victoria que le dio la mayoría en la Asamblea Nacional (Congreso) y la convirtió en fuerte contrapeso del Ejecutivo.
Las elecciones deberían haberse celebrado a fines de 2016, pero fueron pospuestas. El Consejo Nacional Electoral (CNE) las convocó para el próximo 10 de diciembre, pero la Asamblea Constituyente, que se instaló con poderes plenipotenciarios en agosto, las adelantó para hoy.
La oposición consideró desde el principio a la Constituyente como un órgano fraudulento, alegando que Maduro no consultó al pueblo si quería la activación de ese mecanismo. Aunque unos 40 países advirtieron que desconocen la Constituyente, el presidente sostiene que se trata de un organismo soberano al cual deben subordinarse los demás poderes.
Advertencia
El jueves, Maduro adelantó que los gobernadores electos deberán reconocer la Constituyente e incluso jurar su cargo ante ella.
“Gobernador que no jure en la Constituyente no tomará su cargo”, afirmó y agregó que “todo el que salga a votar estará respaldando a la Constituyente, que es quien la convoca”.
El jefe de campaña de la coalición opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD), Gerardo Blyde, replicó que ninguno de sus candidatos que gane se subordinará a esa “asamblea fraudulenta”.
“Estas elecciones no le pertenecen a Maduro, no le pertenecen al CNE; quien convoca este proceso es la ley, la Constitución”, replicó.
Distribución de fuerzas
Hoy, 11 gobernadores del oficialismo buscarán la reelección, incluyendo a siete que son militares retirados.
En la oposición, los gobernadores de Miranda, Henrique Capriles, y de Amazonas, Liborio Guarulla, fueron inhabilitados y sólo Henri Falcón buscará otro mandato en la región occidental de Lara.
Varios gobernadores del oficialismo ven peligrar la continuidad en sus cargos, entre ellos Francisco Arias, uno de los comandantes rebeldes que participó en el intento de golpe de 1992 encabezado por Hugo Chávez. Enfrenta al opositor Juan Pablo Guanipa en el occidental estado Zulia.
La oposición espera una participación de más de 60 por ciento del padrón, lo que aumentará sus posibilidades, mientras el segundo hombre del chavismo, Diosdado Cabello, pronosticó que el oficialismo ganará las 23 gobernaciones.
Un sector de la oposición critica el hecho de que la MUD aceptara participar en los comicios, luego de las protestas entre abril y julio, alegando que ello traiciona el movimiento de resistencia. Pero las elecciones confirmarán un cambio de escenario del que tenía el país hasta el 30 de julio, el último día de protestas callejeras que dejaron 123 muertos.
El CNE ha sido objeto de críticas al avalar las elecciones del 30 de julio, en las que se escogieron los 545 miembros de la Constituyente, en una controvertida votación sin participación de la oposición.
El ente electoral quedó en el centro del debate después de que la empresa Smartmatic, que le suministra servicios informáticos, denunciara que los resultados de la participación fueron inflados.
El CNE dijo que votaron al menos 8,09 millones de personas, pero Smartmatic afirmó que la cifra fue alterada en al menos un millón de participantes.
Además, la oposición dice que el CNE reubicó a última hora cientos de centros de votación para alejar a 400 mil electores de su tradicional ambiente electoral. El CNE alega razones de seguridad.